Trans Don Apolinar
Esta segunda visita a la colonia La Malinche fue muy provechosa, ya que pensamos que la interacción es excelente. Esta vez llegamos a la zona en medio de nubes pesadas que anunciaban lluvia, un clima triste, pero al interior del plantón las cosas son diferentes; llegamos y están comiendo algunos, tomando café otros, hay convivencia y buen ambiente.
Somos amablemente recibidos e invitados a ver lo que denominan “Zona 0”. Pasamos y no mucho se ha movido, los escombros siguen y junto a las vallas metálicas aun permanecen policías.
Sin pedirlo el señor Apolinar sube con nosotros y comienza a narrarnos su propia experiencia, sus recuerdos; se nota intranquilo, por momentos se le corta la voz y enciende un cigarro. Recuerda a sus vecinos, lo que era su colonia, entiende el impacto ecológico, vaticina desabasto de agua “que se verá en esta época de lluvias” y el “saqueo” de que fueron objeto; de cómo las autoridades federales y locales no los oyen, contrario a la difusión entre diversos movimientos sociales y asociaciones civiles nacionales y extranjeras.
Nos retiramos con la invitación a la asamblea del domingo a las 11 de la mañana, con la necesidad de grabar los relatos y con la sorpresa de que de 7 a 8 de la noche hay “rosario”(LG).